jueves, 4 de marzo de 2010

La arquitectura de la ciudad, Aldo Rossi


Paradigma:
La unidad residencial de Gallaratese,
Milán 1969 – 1970.
Proyectada por Aldo Rossi, arquitecto italiano nacido en la primera mitad del siglo XX .

A lo largo de su vida, Rossi procuró centrar su atención en la memoria y la historia de la ciudad y de sus habitantes. Creía que sólo tomando en consideración la relación que existe entre las personas y los espacios que habitan, podría construirse una arquitectura para hacer nuestras vidas más libres, visibles y hermosas. (tomado del discurso de Aldo Rossi cuando recibió el Premio Priztker)

Idea 1: espacio-tiempo
Para entender cualquier creación humana es necesario tomar en consideración el contexto en el que nace, es decir, el tiempo y el espacio en el que su autor la crea.
En este caso, Rossi nació en el llamado Movimiento Moderno, que agrupaba un conjunto de tendencias basadas en lo que se conoce como el principio funcionalista, según el cual la forma física de los edificios debía estar subordinada a su función.
En el paradigma estudiado podemos observar como Rossi utiliza un mismo material y una multiplicación de columnas para agudizar la sistematización y organización basada en la geometrización del espacio y en la repetición

Idea 2: el mundo como gran teatro
Rossi reconoce que la ciudad no debe ser entendida como la suma de edificios y calles independientes de la vida humana, sino como un elemento que juega un papel fundamental en la sociedad. Esto significa que el espacio humano no es un contenedor sin significado, sino que existe una estrecha vinculación entre éste y los comportamientos tanto individuales como colectivos. El espacio se define en relación a los seres humanos que lo usan, lo disfrutan, lo recorren y lo dominan.

“Me gustan especialmente los teatros vacíos, con pocas luces encendidas o, como mucho, durante los ensayos parciales, en los que las voces repiten la misma escena, la descomponen, la retoman, permaneciendo más acá de la acción. La repetición, el "collage", la traslación de elementos de una composición a otra, también nos coloca, en cada proyecto, ante otro proyecto que querríamos desarrollar y que es, a su vez, memoria de otras cosas... Verse obligado a la repetición significa también falta de esperanza y creo que rehacer siempre lo mismo para que resulte diferente es un ejercicio tan difícil como mirar y repetir las cosas.” Aldo Rossi, Autobiografía científica, p.30.

Esta unidad residencial se puede entender como un gran teatro donde el cambio de ritmo entre el espesor reducido de los pilares y las paredes portantes y la forma cilíndrica y monumental de los cuatro pilares centrales, produce una ruptura en la lectura del escenario donde los habitantes, actores, llevarán a cabo su vida en el escenario que Rossi ha creado para ellos.


Esquema funcional
El edificio se dispone como un eje longitudinal lineal que se despliega como un cuerpo de 182 m de largo por 12 m de profundidad, elevado y aporticado. Se propone el despliegue de organización sobre el concepto del modelo de calle interior propuesto por Le Corbusier.

Los pilares y paredes tienen 20cm de espesor y cada 16 muros de soporte se ubican un grupo de escaleras. La planta baja es libre y soporta las unidades habitacionales que se repiten sistemáticamente sobre los pilares de elevación variable. El bloque de disposición horizontal requiere una junta de dilatación que se desmarca de forma acentuada dando origen a la disposición de un grupo de cuatro columnas cilíndricas de 1.80m de diámetro.
Los apartamentos constan de dos habitaciones, zonas de servicio y área social. Disponen de dos fachadas por las cuales se logran la ventilación y la iluminación requeridas.

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